Comportamiento del usuario en tu web: cómo Indigitall te ayuda a mejorarlo

El objetivo de una página web de negocio o tienda online suele ser el de conseguir más clientes. En ocasiones, parece que todo está bien, pero las ventas no llegan. En ocasiones, esto es porque el comportamiento del usuario en tu web no es el adecuado y hay que hacer cambios que no siempre son tan visibles. 

Por ello, te vamos a dar una pequeña guía para entender cómo se comporta el usuario, qué datos se pueden extraer y medir y cómo mejorar. De este modo, conseguirás una mayor retención y más conversiones, es decir, que aumentarán los beneficios y el visitante se convertirá en un cliente más fácilmente. 

¿Qué es el comportamiento del usuario online?

Se refiere a cómo interactúa un usuario en un sitio web al visitarlo. Esto incluye los enlaces que visitan, dónde hacen clic, cuándo y cómo se desplazan por el sitio y cuánto tiempo está presente. Además, analiza desde qué dispositivo está accediendo y también si reproducen o descargan tu contenido multimedia. 

Para cumplir con la RGPD, programas como Google Analytics identifican a los usuarios de manera anónima. Esto permite saber cómo interactúan, pero no saber quiénes son, cumpliendo así con la normativa y protegiendo su privacidad. 

¿Qué datos importantes puedes obtener de ello?

Del comportamiento del usuario se pueden extraer varias métricas y datos importantes:

• Porcentaje de rebote: llamamos porcentaje de rebote a la cantidad de usuarios que han abandonado una web sin interactuar con ella, es decir, sin hacer clic, scroll o si quiera navegar. 
• Duración de la sesión: consiste en el tiempo que pasa un usuario en la web. Eso sí, tiene que interactuar. Si simplemente deja la web abierta y no hace más, se contabiliza como un rebote y nula duración. 
• Visitas únicas: es el número de visitantes únicos que tiene la página, es decir, los usuarios que están entrando desde Google, redes sociales u otros canales. 
• Conversiones: mide la cantidad de acciones relevantes que realiza el usuario. Desde rellenar un formulario hasta hacer una compra, pasando por ver vídeos o hacer clic en sitios determinados, este indicador es crucial para determinar el éxito del sitio. 

Cómo medir el comportamiento del usuario

Una vez que obtengas los datos, es hora de medir si todo está funcionando correctamente o no. Esto se hace analizando las KPIs anteriores con herramientas como Analytics y otras herramientas de SEO, usabilidad y marketing digital. 

Si se saben utilizar, se pueden detectar patrones y métricas relacionadas a los datos anteriores. Miden el porcentaje de rebote, el número de visitas, las palabras clave que han buscado, cómo han interactuado en la web y si han hecho alguna acción, como rellenar un formulario o descargar un archivo. Esto te lo indica a lo largo del tiempo, viendo así la evolución. 

Pero, ¿Cómo debo interpretar los datos que he obtenido? Si detectas estas métricas, generalmente suele haber algún problema que corregir:

Alto porcentaje de rebote

Uno de los mayores problemas es detectar un porcentaje de rebote demasiado alto. Esto puede deberse a problemas de diseño, mala velocidad de carga y una web mal optimizada para dispositivos móviles. 

Por otro lado, podría ser por problemas de SEO y SEM. ¿Estás atacando las palabras clave relevantes? ¿Estás segmentando correctamente? Si no es así, podría haber mucho rebote. 

El usuario se va rápido de la web

Quizá tengas un porcentaje de rebote rápido, pero tus usuarios se van rápido. Entran, leen el texto y se van, sin tomar acción y sin darte tráfico. Esto suele estar causado por la falta de enlaces internos, que permitan ir de un sitio a otro, así como problemas de diseño. 

Además, un contenido demasiado monótono y repetitivo, no engancha a los usuarios. Leerán, verán que es más de lo mismo y se irán, sin quedarse más y sin tomar acción. 

Tasa de conversión baja

Si tienes mucho tráfico, pero pocos clientes toman acción, el ratio de conversión es bajo y eso es un problema. Puede tener muchas causas, como tener un proceso de compra demasiado complejo, una web caótica, la ausencia de contenido transaccional, una landing page de ventas mal redactada o un proceso de captación de leads poco atractivo. 

Tenerlo bajo supone un problema porque te está entrando tráfico, pero no te sirve para nada, ya que son visitantes que vienen y van. A veces, simplemente tu contenido es genérico y no te estás desmarcando de la competencia. 

Poco tráfico

Si tienes pocas visitas al sitio, nadie te conoce. Puedes tener la web mejor diseñada y con una carta de ventas impecable, pero no te están encontrando en internet, así que tampoco venderás. 

Generalmente, esto se debe a la ausencia de un plan SEO bien ejecutado, una keyword research inadecuada y en general, a que estás creando un contenido poco relevante. En ocasiones, se debe a otros factores, como una mala segmentación en publicidad, una web mal diseñada (el alto porcentaje de rebote afecta al SEO) o poco trabajo en redes. 

¿Cómo mejorar la fuga de usuarios de tu web?

Ahora que ya sabes todo sobre el comportamiento de los usuarios, es hora de ponerle remedio. Mejora la experiencia del usuario creando una web rápida, adaptada a varios dispositivos y con contenido de calidad, bien enfocado a SEO y segmentado adecuadamente. 

Al haber mucha competencia, busca ser único en lo que haces para desmarcarte. Una buena forma de hacerlo es mediante un servicio de personalización web. Esto permite crear un contenido adaptado y hecho a medida de los clientes, los cuáles ya conocemos gracias al análisis de su comportamiento. 

Este servicio cuenta con la comunicación personalizada, la cual puede ayudarte a aumentar las ventas. La adaptación y la capacidad de interactuar ayuda a reducir el porcentaje de rebote, a aumentar la fidelidad de la marca y a terminar haciendo una compra (o incluso varias de manera recurrente).